Mi nuevo libro

Mi nuevo libro
Puedes pedirlo al WhatsApp +51 987774365

miércoles, 4 de octubre de 2017

Del autor y sus fantasmas

- Me siento abatido. El amor es un mal inquilino. Viene, renta y paga por adelantado, dice que es indefinido y luego se marcha sin dejar rastro. 
Una vez fui feliz; pero ya no lo recuerdo. Borrosa se ve mi sonrisa de ese entonces. Pocos recuerdos quedan de tiempos gloriosos. El hoy no es más que una guerra de egos, de celos enfermizos como aviadores lanzando bombas y campos minados de intranquilidad.
No estoy cómodo con nadie, soy como un paciente terminal que solo intenta ser atendido por su doctor, ese mismo capricho tengo; pero la ideal se olvidó de mí o tal vez, ni siquiera existe. 
De repente no es más que una metáfora romántica de una poesía de Bécquer o quizá, solo la vi en sueños y desde entonces pienso que aparecerá en la realidad. 
Es curioso, la veo y siento cuando sueño; pero no me paso el tiempo durmiendo porque escribir es la prioridad, por eso, cuando creen que sueño, yo escribo, cuando me imaginan durmiendo, tecleo. Cuando creen que estoy soñando con ella, intento reflejarla en mis textos, sentir que aparece detrás y me sorprende; pero no está, ella vive en la realidad de los reinos de Hypnos y yo no puedo quedarme dormido por siempre.
Todo lo romántico que puedo llegar a ser lo uso para escribir, las relaciones interpersonales ya no son mi afán, muchas mujeres pasaron por mi vida, rentaron mi corazón y no pudieron mantenerlo enamorado. Desconozco las razones, tal vez, errores menores que no aprendieron. Yo mejoro, siempre evoluciono; pero no les agrada el hecho que escriba hasta morir y lo que engloba mi labor. Los celos de gente que ama lo que hago, el desespero por verme escribir y no ir a la cama a dormir, el hecho de querer mi tiempo y no comprender que estuve tiempo a tu lado, factores que desencadenan mis ganas de terminar. 
No me llamo incomprendido, solo espero que me acepten. Que tengo mi vida pública en redes y la privada entre cuatro paredes. No hay fotos de mi pequeña ni comparto relaciones amorosas, cuento situaciones pasadas con dosis de fantasía, relato historias mías fusionadas con otras, no comparto mi vida privada; pero hay gente que no comprende que eso no significa que hago cosas a escondidas, es solo que prefiero no ventilarlo todo y reservarme para mí lo que más quiero y lo tengo con recelo.
Me dicen indiferente cuando termino relaciones y avanzo sin mirar atrás, uso los recuerdos y las emociones para escribir y en soledad me siento tan nostálgico que algunas lágrimas caen. Nunca cuento mis tristezas, las reservo para mí, porque adoro compartir alegrías y guardar lo peor.
Ves mi rostro pero no mi corazón. No me digas indiferente cuando no sabes todo lo que he vivido. No digo que soy fuerte porque me crea valiente, sino porque la vida me hizo tener esta coraza y unos huevos de acero que no se caen en las derrotas. 
No me conoces si piensas que soy frio, si avanzo cuando culmino, si adhiero experiencia y mejoro, soy así porque la vida me dio una patada en el trasero alguna vez y me volví en un sujeto con agallas. 
Mi lado sentimental lo muestro en escritos, en algunos que ni siquiera comparto, en otros que comparto a íntimos amigos y en algunos sucesos hasta mueren en la mente.
Hoy me abro como nunca y deslizo sentires en un texto, quiero que sepan quien soy, que no oculto más que algunas emociones y recuerdos que reservo, pero que el resto de mi vida es libre para historias de toda índole. He amado muchas veces, sueño con el para siempre; pero cada vez lo noto aislado, como un naufrago que ve en el mar un barco fantasma que parece asomarse y nunca llega. 
Mi felicidad es el trabajo diario, el crecer con lo que hago y ver crecer a quien adoro; pero compañeras no hay ni habrán; aunque puede que sí, pero se irán o dejaré ir. 
Me embarco en un proyecto personal con nombre y apellido, no soy de nadie por el momento, ni del tiempo ni el destino, solo de mi soledad, fiel amiga y la noche llena de textos, con gente que conozco a alrededor de una pantalla y que confío lo poco que dejo mostrarme. 
Por el momento hay tanto de mí para dar al mundo; pero nada para ofrecerte.
Estoy cansado de las peleas, de los celos y las situaciones de intranquilidad, por eso me alejo de todo y me dedico a escribir como alguna alguien me dijo: Escribe, solo hazlo, no piensas en otra cosa, solo escribe y se feliz. Crea mundos, sucesos, mujeres y demás. Cuando te des cuenta, vas a estar sumergido en otro mundo, un mundo ideal para ti.
Daniela me lo dijo alguna vez.
Buen día para todos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario