19 y 31

- Ella es brillante. De hecho, hermosa; aunque adoro cuando habla de los libros que ha leído, de la forma cómo ve el mundo actual, me asombra para bien su madurez ante las situaciones cotidianas, la manera como las maneja y por supuesto, el que prefiera el hogar a las fiestas y el cine a las discotecas. Me enamora tal cual es y en este tiempo no he pensado en su edad como lo hice al inicio. Tiene 19, yo 31; ¿y qué? ¿Iba a perderme estas emociones por un tema tan banal como la edad? ¡Al diablo! Me gusta y aunque parezca, en broma, mi hermana menor, yo la adoro por como es. De esas que solo encuentras una vez. Y ella, me ve de una manera increíble.
Me cuenta un amigo cuya novia es menor. Todo un asunto que hace que el amor sea fascinante en todo su esplendor.


Fin